Mario Belesi, director de Solidworks para América Latina en Dassault Systèmes, nos cuenta cómo las innovaciones tecnológicas, como 3D y Virtual Twins, serán necesarias para lograr los objetivos y metas de proteger el planeta.
Con el nivel de degradación ambiental provocado por los modelos productivos actuales y con el consumo llegando a un punto sin retorno, es cada vez más claro que debemos tomar medidas urgentes para prevenir un cambio climático drástico y daños irreversibles. Es necesario actuar con rapidez.
Esa es la razón por la que los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas han identificado una amplia gama de objetivos que las empresas y los gobiernos deben alcanzar para 2030, en un claro y urgente llamamiento para involucrarlos en la protección del planeta.
Sin embargo, para que estos desafíos sean factibles, el mundo necesita innovaciones y tecnologías radicalmente disruptivas. Después de todo, los viejos enfoques no fueron suficientes para lograr una economía circular sin emisiones de carbono durante las últimas décadas.
Cada vez es más importante que los fabricantes busquen formas reales de transformar sus modelos de producción, con el fin de impulsar la sostenibilidad en toda la cadena de innovación del producto, desde el concepto hasta su reciclaje al final de su vida útil. El futuro de la industria y el desarrollo de productos debe llevar necesariamente este compromiso a un sistema verdaderamente sostenible y colaborativo.
En este escenario, podemos señalar que las tecnologías de simulación 3D y Virtual Twins pueden ser las grandes palancas para crear un entorno donde la sostenibilidad y la economía circular puedan florecer, implementando las transformaciones que tanto la industria como el diseño necesitan.
Esto se debe a que estas soluciones permiten la creación de entornos de prueba más seguros para el desarrollo de productos y para la implementación de innovaciones con menor impacto en el medio ambiente.
La buena noticia es que estas soluciones ya están disponibles hoy, con un mercado estimado de 5.400 millones de dólares, en 2021, según informes del Foro Económico Mundial. Esta es una gran oportunidad para innovar, ayudando a empresas de diferentes segmentos a mejorar su forma de crecer y operar. Además, según la proyección del foro, se espera que el mercado de soluciones de modelado virtual, por ejemplo, crezca a una tasa del 36% durante los próximos cinco años.
Con una poderosa plataforma de desarrollo digital, las empresas pueden predecir con precisión las propiedades de los materiales que aún no se han sintetizado o probado basándose en parámetros del mundo real, simular y ejecutar modelos virtuales utilizando datos experimentales, en lugar de depender de modelos existentes o ecuaciones matemáticas, además de desarrollar procesos y sistemas específicos para reducir los impactos en el planeta.
Al crear un gemelo virtual de sus líneas de producción, los fabricantes brasileños pueden optimizar el flujo de trabajo, mejorar el proceso de fabricación e identificar posibles cuellos de botella que eventualmente puedan ocurrir durante la producción, incluso antes de comenzar a producir un producto. Desde un punto de vista técnico, otro beneficio es que el modelo 3D es capaz de reproducir todas las características y parámetros del mundo real, lo que significa poder evaluar y medir todas las etapas de la vida útil de los materiales, mejorando así la producción, clasificación, reciclaje y reutilización de elementos, algo fundamental en el mundo actual.
Como resultado, las plataformas tridimensionales de colaboración y experiencia deben verse como el diferenciador crítico que puede ayudar a la industria brasileña a traducir sus esfuerzos de sustentabilidad en resultados tangibles, medibles y efectivos, generando valor para el país.
Esta tecnología también puede reducir el flujo de desechos electrónicos y proporcionar productos más sostenibles. Para este desafío, los fabricantes pueden contar con una plataforma integrada para crear y explorar un gemelo virtual casi idéntico al mundo físico. Una plataforma que integre todo el ciclo de vida del producto ayudará a los fabricantes a cumplir con el cumplimiento normativo, lo que permitirá elegir materiales inteligentes, aumentar la colaboración, la trazabilidad de los materiales y obtener escalabilidad para aumentar el rendimiento.
Cabe mencionar que, a través de la tecnología de simulación virtual, Brasil podrá diseñar dispositivos para mejorar varios aspectos de los ciclos de vida de sus productos y servicios. Son capaces de evaluar y aumentar rápidamente las características de durabilidad y reutilización de los materiales, ejecutando su gemelo virtual dentro de un amplio abanico de configuraciones que crean procesos de montaje y desmontaje, ensayos de resistencia y posibilidad de utilizar nuevas materias primas, entre otros.
Las plataformas digitales también permiten una mayor capacidad de gestión, lo que permite a los fabricantes acceder a la información del producto, incluida la realización de comparaciones sobre la descomposición de componentes y el mejor uso de sustancias. Los fabricantes pueden comparar datos y ajustar rápidamente los nuevos productos a los estándares de diferentes países del mundo.
El futuro de la industria y el diseño, por tanto, está directamente ligado a la experiencia virtual. Modelar completamente las cadenas de valor, los gemelos virtuales y la simulación en tres dimensiones puede mejorar la sostenibilidad del planeta, gestionando todo el ciclo de vida de los productos y servicios, desde el diseño del proyecto hasta la reutilización, y minimizando el uso de material durante el proceso de fabricación en diferentes segmentos de la industria. .
Alcanzar un mayor nivel de sostenibilidad requerirá una nueva capacidad de interacción entre las empresas y todo su ecosistema productivo. También requerirá más transparencia y previsibilidad para anticipar el desarrollo de los productos, desde la concepción de los proyectos hasta la logística inversa después de la vida útil de las piezas. Ciertamente, este es un viaje que requerirá innovaciones disruptivas, como la simulación en tres dimensiones y el uso de tecnología de punta. Por tanto, Brasil tendrá todas las condiciones para volver a competir con protagonismo en el escenario global.